EL NUNCA ESPERÓ MUCHO
De acuerdo, Mundo, has mantenido tu palabra conmigo,
mantenido tu palabra conmigo;
en general has probado ser
como dijiste que eras.
Desde que siendo niño me tumbaba
sobre la hierba y miraba el cielo.
Nunca, yo mismo, esperé
que la vida sería siempre justa.
Entonces dijiste, y has repetido siempre,
muchas veces,
en aquella voz misteriosa que despliegas
desde las nubes y montañas alrededor:
“Mucha gente me ha amado desesperadamente,
muchos con suave serenidad,
mientras algunos mostraron su descontento conmigo,
hasta que estuvieron bajo tierra.
No prometo mucho,
chico, demasiado;
solamente sucesos afines y sin colorido",
dijiste a mentes como la mía.
¡Sabia advertencia en tu haber!
Que yo no pude ignorar,
y así pudieron seguir el dolor y los trabajos
que cada año pudiera asignar.
(traducción Guillermo G. Ruiz)
Arrepentirse ante la muerte
puede ser cristiano,
pero no es elegante.
"Elegante" es cristiano, como el Buen Ladrón,
e irreductible también.
Cristiano e irreductible ¿son sinónimos?
