La unidad mínima del Diario de Thoreau es una jornada.Las traducciones parciales son en el mejor caso destellos, pero no proporcionan el sentido de su escritura.Esta sí, es una traducción completa del 29 de Diciembre de 1841
DIARIO 29 DE DICIEMBRE DE 1841
Uno no aprende pronto el comercio de
la vida. Que uno pueda sacar adelante una verdadera vida requiere más arte y
habilidad delicada que cualquier otro trabajo. Necesita tanto los finos dedos
de mujer como la dura mano del granjero. El trabajo diario demasiado a menudo
endurece el pericarpo del corazón tanto como la mano. La gran familiaridad con
el mundo debe manejarse hábilmente, para que no se salga con las suya y nos
prive de alguna susceptibilidad. La experiencia nos priva de nuestra inocencia
y la sabiduría de nuestra ignorancia. Permítasenos elegir en el mundo sin
aprender sus caminos. Semanas o meses enteros de mi vida veraniega se esfuman
en finas capas como niebla o humo hasta que una mañana cálida quizás veo un lienzo de niebla llevada desde el arroyo
al soto, su sombra a través de los campos, que adquiere un nuevo significado de
tal accidente y como tal vapor es elevado sobre la tierra, así las semanas
siguientes serán elevadas sobre el plano de las actuales; o cuando el sol que se
pone cae inclinado a través de los pastos y las vacas mugen a mi oído interior
y solo realzan la calma, y el ocaso es como el orto, una hora que comienza y no
una hora final, como si nunca terminara, con su claro ámbar de poniente incitando
a loa hombres a vidas de pureza tan límpida. Entonces brillan otras partes de
mi jornada de trabajo que las que pensé al mediodía, porque descubro el verdadero
propósito de mi carga, como cuando el agricultor ha alcanzado el final del
surco y mira atrás puede decir de la mejor manera dónde la tierra arada brilla
más. Toda verdadera grandeza discurre de la misma manera nivelada y es tan sin
propósito como el arado en el surco. Usa el vestido más común y habla el
lenguaje más común. Su tema es líneas de roció y tela de araña, johnswort y
loosetrife, porque nunca se ha apartado de su reposo y es por completo
ignorante de cosas ajenas.
El cielo
es el lugar más adentro. Los que tienen el bien no tienen que viajar lejos.
¡Qué ánimo no podemos obtener del pensamiento de que nuestros trayectos no
divergen y que no fuimos desviados, sino que tal como la red del destino se
tejió se encuentra completa y somos dispuestos más y más en su centro!.Y
nuestros destinos incluso son sociales.
Ninguna sabiduría puede tomar el lugar de la humanidad, y yo
la encuentro en el viejo Chaucer que ama los sonidos más largos y que rima
mejor que algunos de Milton o Edmund. Desearía que pudiera ser tan sereno como
es Dios. Puedo convocar a mi mente la hora estival más serena en la que la
cigarra canta sobre los gordolobos, y hay un valor en aquel tiempo cuya memoria
es armadura que puede sonreír a cada golpe de la fortuna. Un hombre debería salir
de la naturaleza con el canto del saltamontes y el trino del veery resonando en
su oído. Estos sonidos terrestres solo morirán durante una estación, como las
cuerdas del arpa vibran y resuenan. La muerte es aquella expresiva pausa en la
música del estallido. Yo sería tan limpio como vosotros, bosques. No descansaré
hasta ser tan inocente como vosotros. Sé que antes o después lograré una
inocencia sin mácula, porque cuando considero tal estado, incluso ahora, estoy
encantado. Si fuéramos suficientemente sabios deberíamos ver cuál es la virtud
con la que estamos endeudados por cualquier momento más feliz que podamos
tener; sin duda que la hemos ganado alguna vez. Estos movimientos ubicuos en la
naturaleza deben ser seguramente las circulaciones de Dios.
La vela
desplegada, el arroyo que fluye, el árbol ondulante, el viento que sopla- ¿En
qué otro lugar su infinita salud y libertad?.No puedo ver nada tan propio y
santo como el ejercicio no relajado y jovial en este retiro que Dios ha
construido para nosotros. La sospecha del pecado nunca alcanza a este
pensamiento. Oh, si los hombres sintieran esto nunca construirían templos de
mármol o diamante, sino que sería sacrílego y profano, y se ejercitarían siempre
en este paraíso. En el día más frío él se funde en algún lugar. Parece que solo
una cualidad, un pequeño incidente en la biografía humana debe decirse o
escribirse en algún lugar para que todos los lectores pueden perseguirlo
locamente, y para que el hombre que lo hizo sea considerado un semidiós por
ello.
Lo que
todos nosotros hacemos, nadie puede decirlo, y cuando algún hablante afortunado
profiere una verdad de nuestra experiencia y no de nuestra especulación,
pensamos que debe haber tenido para ayudarle las nueve Musas y las tres
Gracias. Me puedo alargar mucho cuando vengo a la respiración de Chaucer; y
pienso “Bien, yo podría ser el amigo de este hombre”, porque él caminó en aquel
lugar común y retirado en el que yo lo hago, y no fue demasiado bueno para
vivir. Me siento apenado cuando se destacan hechos no viriles que pudiera haber
cometido, porque ello resta de su respiración y humanidad.
HDT
(traducción Guillermo G.Ruiz)
(Esta traducción esta dedicada a Alvaro, Anselmo, Bea, Henry, Jaime, Javier y Jose, Kuka, Manolo, Mar y Miguel, Magu, Santiago, Sol,Tatu, Wade, Enrique y Elvira. Y también a los demás. Por su compañía y afecto los días 24, 25 y 29 de Diciembre, 1,2,3 y 5 de Enero)
To the parting year
(...)
already you are out of reach
you do not know us or hear us
you scarcely remember us
already we cannot imagine
where you are
what we remember of love is starlight
William S.Merwin
Dec.
29 1841 . Wednesday.
One
does not soon learn the trade of life. That one may work out a true life
requires more art and delicate skill than any other work. There is need of the
nice, fingers of the girl as well as the tough hand of the farmer. The daily
work is too often toughening the pericarp of the heart as well as the hand. Great
familiarity with the world must be nicely managed, lest it win away and bereave
us of some susceptibility .Experience bereaves us of our innocence; wisdom
bereaves us of our ignorance. Let us wale in the world without learning its
ways. Whole weeks or months of my summer life elide away in thin volumes like
mist or smoke, till at length some warm morning, perchance, I see a sheet of
mist blown down the brook to the swamp, its shadow Hitting; across the fields,
which have caught a new significance from that accident ; and as that vapor
is raised above the earth, so shall the next weeks be elevated above the plane
of the actual ; or when the setting sun slants
across the pastures, and the cows low to my inward ear and only enhance the
stillness, and the eve is as the dawn, a beginning hour and not a final one, as
if it would never have done, with its clear western amber inciting men to lives
of as limpid purity. Then do other parts of my day's work shine than I had
thought at noon, for I discover the real purport of my toil, as, when the
husbandman has reached the end of the furrow and looks back, he can best tell
where the pressed earth shines most.
All
true greatness runs as level a course, and is as unaspiring, as the plow in the
furrow. It wears the homeliest dress and speaks the homeliest language. Its
theme is gossamer and dew lines, johnswort and loosestrife, for it has never
stirred from its repose and is most ignorant of foreign parts.
Heaven is the inmost place. The good have not to
travel far. What cheer may we not derive from the thought that our courses do
not diverge, and we wend not asunder, but as the web of destiny is woven it
[is] fulled, and we are cast more and more into the centre! And our fates even
are social.
There is no wisdom which can take [the] place of
humanity, and I find that in old Chaucer that love rings longest which rhymes
best with some saw of Milton's or Edmunds's. I wish I could be as still as God is.
I can , recall to my mind the stillest summer hour, in which the grasshopper
sings over the mulleins, and there is a valor in that time the memory of which
is armor that earl laugh at any blow of fortune . A man should go out [of]
nature with the chirp of the cricket or the trill of the veery ringing in his
ear. These earthly sounds should only die away for a season, as the strains of
the harp rise and swell. Death is that expressive pause in the music of the
blast.' I would be as clean as ye, O woods. I shall not rest till I be as
innocent as you. I know that I shall sooner or later attain to an unspotted innocence,
for when I consider that state even now I am thrilled .If we were wise enough,
we should see to what virtue we were indebted for any happier moment we might have,
nor doubt we had earned this at some time. These motions everywhere in nature
must surely [be] the circulations of God. The flowing sail, the running stream,
the waving tree, the roving wind,-whence else their infinite health and
freedom?. I can see nothing so proper and holy as unrelaxed play and frolic in
this bower. God has built for us. The suspicion of sin never comes to this
thought. Oh, if men felt this they would never build temples even of marble or
diamond, but it would be sacrilege and prophane, but disport them forever in
this paradise. In the coldest day it melts somewhere. It seems as if only one
trait, one little incident in human biography, need to be said or written in
some era, that all readers may go mad after it, and the man who did the miracle
is made a demigod henceforth.
What we all do, not one can tell; and when some lucky
speaker utters a truth of our experience and not of our speculation, we think
he must have had the nine Muses and the three Graces to help him. I can at length
stretch me when I come to Chaucer's breadth; and I think, "Well, I could
be that man's acquaintance," I for he walked in that low and retired way
that I do, and was not too good to live. I am grieved when they hint
of any unmanly submissions he may have made, for that subtracts from his
breadth and humanity.
HDT