January 21, 1838
in Thoreau’s Journal:
Man is the artificer of his own happiness. Let him beware how he complains of the disposition of circumstances, for it is his own disposition he blames. If this is sour, or that rough, or the other steep, let him think if it be not his work. If his look curdles all hearts, let him not complain of a sour reception; if he hobble in this gait, let him not grumble at the roughness of the way; if he is weak in the knees, let him not call on the hill steep.
This was the pith of the inscription on the wall of the Swedish inn: “You will find at Trolhate excellent bread, meat, and wine, provided you bring them with you.”
El hombre es el artífice de su propia felicidad. Que sea consciente de cómo se queja de la disposición de las circunstancias, porque es a su propia disposición a la que así culpa.Si esta es amarga, o aquella áspera o la otra empinada, que piense si no es este su trabajo. Si su mirada cuaja todos los corazones, que no se queje de una recepción amarga; si camina de esta manera, que no se proteste de la dureza del camino; si sus rodillas están débiles, que no se aventure en la colina empinada.
Este era el meollo de la inscripción en la pared de una posada Sueca: "Encontrarás en Trolhate excelentes pan, carne y vino, siempre que los traigas contigo"
¿Es esto "voluntarismo mágico"?
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