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Saturday, October 28, 2017

INMORTALIDAD



La belleza está donde es percibida

HDT
Diario 16 de diciembre de 1840



UNA FRAGANCIA NOCTURNA

Ahora soy lo bastante viejo para recordar
A gente hablando de la inmortalidad
Como si fuera algo conocido que existiera
Una sustancia tangible que pudiera ser adquirida
Para ser usada quizás en la cocina
Cada día en cualquier cosa hecha allí
Para siempre y aplicaban la palabra
A la literatura y los nombres de cosas
Nombres de personas y la designación de otras
Cosas por ellos y sin duda repitieron
Aquella palabra con algún elemento de creencia
Cuando nombraron un género de algo más
De un centenar de especies de árboles y arbustos
Algunos con flores más fragantes por la noche
De Heildelberg médico y botánico
Altamente considerado en su día hace
Cuatro siglos la inmortalidad
Podría ser como eso con las especies dispersas
Continuando sus variadas evoluciones
Las flores abriéndose de día o de noche
Sin conocimiento de tener un nombre
De nadie y su fragancia si
Recuerda lago no acordándose de él

W.S. Merwin, From The River Sound (1999)

(traducción Guillermo Ruiz) 

Saturday, October 14, 2017

LA HOJA DE OTOÑO



LA HOJA DE OTOÑO (THE FALL OF THE LEAF)

Agotado de la marca de esta riqueza veraniega,
De su muestra superficial y sin refinar,
Me alejaría disimulada y débilmente,
A donde no llegan los caminos, pero todavía crece lo trivial.

Una mente sobria caminará solitaria,
Lejos de la naturaleza si fuera necesario,
Y poseerá sólo sus propias estaciones,
Teniendo por naturaleza su humanidad.

Algunas veces un tardío pensamiento otoñal
Cruzó mi mente en el verdor de Julio,
Y a su temprana frescura trajo
Frutas maduras más tardías y un cielo otoñal.

Un pensamiento seco pero dorado que brilló
De extremo a extremo del verdor de mi mente,
Y prematuramente pareció sabio,
Demasiado maduro para encontrar cobijo en el enramado veraniego.

Así he visto un hoja amarilla
Entre las brillantes hojas de Junio,
Que pensativa colgaba, aunque sin pesar,
Como una flor honesta, cambió demasiado pronto.

Destilo mi medicina muy lejos,
Donde lo más simple y rudo del año,
Octubre, conduce la guerra que remueve
Y dispersa sus honores sobre el catafalco veraniego.

La tarde del año se dibuja,
Los campos visten su ropaje más tardío,
Desde que se fue la brillantez veraniega,
Algunos granos de noche tiñen el aire del mediodía.

Contemplo las sombras de los árboles
Con sus círculos más amplios alrededor de sus troncos,
Como centinelas que gradualmente
Hacen sus guardias, y los protegen gentilmente.

Y con el declinar de la estación
El sol proporciona una luz más débil,
Debajo de cada acícula del pino,
Se esconde un pequeño auxiliar de la noche.

Detrás de cada arbusto y cada cerca dispersa
Que marcan el verde pensativo del soto
Y muestran su opulencia,
La huella insidiosa de la tarde se muestra a mediodía.

Onda a onda un aire más grávido
Sopla sobre toda la región,
Como si tuviera alguna tintura
De madurez traída del largo sol del verano.

Oigo la cigarra que canta perezosa
Alrededor, debajo de mí, y en lo alto,
Sacude la noche, acuna el día,
Y en cualquier sitio es la canción de cuna de la naturaleza.

Crepita más debajo de la turba,
Donde ha hecho su lecho invernal,
Su sonido crece más débil, pero más amplio,
Una capa de otoño sobre el verano desplegado.

En mi cama al alba
Oigo los gallos proclamar el día,
Aunque la luna brilla serena
Como si no pudieran detener la majestad de su curso.

Ni hacerla descender con su débil canto
De cabalgadura tan alta,
Quien en su brillo no conoce pecado
Ni tiene conciencia de una luz más noble.

Las estrellas no retienen su brillo
Individual o en constelaciones dispersas
Sino que esparcen flechas espartanas
Que traen la noche entre las nubes que avanzan.

¿Ha avanzado el tiempo entonces?
¿Con qué fuente de eterna alegría
inspiras tú los corazones de los hombres
y les enseñas como emplear el día?

Imparte de la abundancia de tu oración,
Tú que te propagas tan libremente,
Algo de valentía en mi corazón
O permíteme beber de tu manantial peremne.

Pequeños pájaros migran en bandadas
y cruzan ahora la bahía de algún humedal
Al tiempo que vuelan y tornan en lo alto,
Con un golpe impremeditado y apresurado entretienen el camino.

La luna es fruta madura en el cielo
Que sobrevuela su cosecha,
El sol rompe tarde su tronco
Ha caído tan bajo desde la altura del verano.

La tierra avara recoge su fruto,
Y lo coloca en el regazo de la noche,
Las estrellas refulgen más brillantes, mudas
Aunque sean lágrimas para ver el accidente de sus señores.

La cosecha se agita en el viento,
Las manzanas maduras se alzan sobre el heno,
El sabor de cereal de mi mente
Me dice que estoy tan maduro como ellas.

Tenía oídos pero ahora tengo sonido
Y visión cuando antes sólo tenía ojos,
Vivo instantes cuando antes sólo vivía años,
Y distingo la verdad cuando antes sólo conocía lo repetido.

Lejos en el bosque estos días de oro
Algunas hojas obedecen la llamada de su artífice,
Y en sus vacíos recintos ejecuta
Con delicado tacto el preludio de su caída.

Retirándose gentilmente del tronco
Se dispersan con suavidad a lo largo,
Donde la misma mano las amontona
Resignadas a dormir sobre la multitud del viejo año.

El solitario abedul está pardo y tranquilo,
La charca más lejana está poblada de hojas,
Que flotan sobre su catafalco de agua,
donde no hay ojo que las vea, ni corazón pesaroso.

Señalé el tiempo del primer viento rudo
Cada hoja curvada como criatura viviente,
Como si con el aire maduro asegurara
Algún tenue memorial de la primavera.

Entonces por obra suya volcó un bote
Y nuevos elementos se embravecieron,
Un palacio pintado que flota
El tesoro de riqueza veraniega por salvar.

Ojalá pudiera retener estos sonido remotos
Y preservarlos para el oído humano,
Los acordes que flotan en las brisas,
Y cantan el réquiem del año que muere.

Permanecí al lado de un grupo de robles ,
Cuando sopló la primavera galerna del otoño,
Que gentilmente meció las copas de los abedules
Agitó la hojas de los robles y murió.

Pero no los acordes que despertó,
Porque en mi sentido más interno oigo
La melodía de la que habló
Creciendo todavía tenuemente en mi oído interior.

Un ráfaga cayó en el río,
Una sombra atravesó el paisaje
Y todavía los helechos silbantes podrían decir
dónde el extraño viajero fue tan rápido.

Como se destacan los refugios de los hombres
En estos días honestos de Octubre
A lo largo del bosque y de los humedales
Los veo asomar a través de la bruma madura.

Yacen inmersos en la Naturaleza
Contra algún risco o a la sombra de un castaño
Débilmente distinguibles por el ojo del viajero
Que lleno de pensamiento atraviesa el soto del bosque.

La cosecha está a la puerta
El castaño esparce sus frutos alrededor
Como si fueran el material que derribó
Los granos amarillos que invaden el suelo.

El nenúfar ama el flujo del río
Los humedales son el fantasma de las margaritas
Los álamos sobre la montaña
Crecen aquí como hijos de la naturaleza.

El arrendajo recorre el bosque de castaños
Las hojas retorcidas y amarillas alrededor
Son la clave y textura de mi humor
Y estos montones de frutos mis tesoros sobre el suelo.

Los árboles desnudos, pobres y finos
No son más ricos que yo,
Pero con un interior tan valiente
Ofrecen sus ramas al cielo de Octubre.

Son pobres caballeros que valientemente esperan
La carga de la caballería invernal,
Guardando un simple estado Romano
Descargado de su exuberancia Persa.

Gracias a Dios que divide el año en estaciones,
Y a veces amablemente dispensa su rayos,
Porque en su invierno esta más próximo
Y se ve mejor en los días más cortos.

Quien gentilmente modera ahora su calor
Y después su frío más duro,
Nos debería permitir saciarnos con las dulzuras veraniegas
O alzarnos sobre la crudeza invernal.

HDT

(Traducción de Guillermo Ruiz)
(Primera vez aquí el 8 de octubre de 2006)

Las palabras de los verdaderos poemas nos dan más que los poemas,
Nos dan lo necesario para que nos construyamos por nosotros mismos
poemas, religiones, política, guerra, paz, conducta, historia, ensayos,
vida cotidiana y todo lo demás,
Ellas equilibran jerarquías, colores, razas, creencias y sexos,
Ellas no buscan la belleza, se las busca,
Tocándolas eternamente, muy cerca de ellas, marcha la belleza, anhelante,
gozosa, enferma de amor.
Ellas nos preparan para la muerte, pero no son el fin, sino el principio,
No llevan a hombre alguno ni a mujer alguna  a su término, ni al
contento, ni a la satisfacción,
A aquellos a quienes aceptan los transportan al espacio, a fin de que
contemplen el nacimiento de las estrellas, de que aprendan uno de los
significados,
De que se lancen con fe absoluta y se deslicen a través de las órbitas
infinitas sin encontrar el reposo jamás

Walt Whitman (Canto del que responde, traducción Francisco Alexander)


Esto obviamente va en contra de la naturaleza de nuestros tiempos que frecuentemente cuestionan e ironizan.Sin embargo yo creo que en el poema debería prevalecer la fe,un breve momento de afirmación.

(Adam Zagajewski, "Un turista distraído que ama la luz", entrevista en Cultura/s, 14 de octubre de 2017)


Puede ocurrir que caigas en la esclavitud, pero hay algo que debes evitar a todo precio: volverte esclavo.
(Adam Zagajewski.Qué reparos opongo a la llamada Nueva Ola.Acantilado 2010. Traducción de Jerzy Slawomirski y Anna Rubió) 
(Primera vez aquí 7 de agosto de 2014) 

(Esta entrada está dedicada a T)

Thursday, October 12, 2017

EL AMOR POR OCTUBRE



Estos días cuando los árboles se han puesto sus tintes otoñales son los días de gala del año-cuando el auténtico follaje de los árboles está teñido como una flor.Es un tiempo adecuado para un festival anual-una exhibición agrícola.

HDT
Diario 1 de octubre de 1851

THE LOVE FOR OCTOBER



Un crío mirando a las ruinas crece más joven
Pero frío
Y quiere despertar a un nuevo nombre
Yo he sido más joven en octubre
Que en todos los meses de primavera
Las hojas de nogal  y espino el color
De los hombros al final del verano
Un mes que ha sido para la montaña
Y es luz allí
La larga hierba yace apuntando colina arriba
Incluso en la muerte por una razón
Que ninguno de nosotros conoce
Y el reyezuelo ríe en la sombra temprana ahora
La mirad brillante viene de nuevo en tu buen tiempo
Aire desnudo en la mañana tardía
Mi amor es para lo ligero
De tacto pie pluma
El día es todavía una hoja amarilla más
Y sin volver beso la luz
por un viejo pozo al final del mes
cogiendo escaramujos
en el sol
W. S. Merwin, “The Love for October”, Migration: New and Selected Poems (Copper Canyon Press, 2005).

(Traducción Guillermo Ruiz) 



But know all of your knowledge is important, but your knowledge will never make anything. It will help you to form the things, but what makes something is something that you will never know. It comes out of you. It’s who you are.

William S. Merwin
(Primera vez aquí 27 de julio de 2013)

Pero lo que hace algo es algo que nunca conocerás.Viene de ti.









Saturday, October 07, 2017

OCTUBRE


Nada está tan seguro de hacerse conocer como la verdad-porque qué otra cosa espera ser conocida?
HDT
Diario 12-12-1851 

TINTES OTOÑALES (I) (primera vez aquí el 19 de septiembre de 2009)

Los europeos que vienen a America se sorprenden de la brillantez de nuestro follaje otoñal. No hay registro de este fenómeno en la poesía inglesa porque los árboles no adquieren allí sino unos pocos colores brillantes. Lo máximo que Thomson dice sobre esta cuestión en su “otoño” es lo que contienen estas líneas:

“Pero mira los bosques multicolores que decaen
sombra más profunda sobre sombra, el campo alrededor
marrón, una umbría multitudinaria, oscuro y marrón
de toda la gama, desde el pálido verde desfalleciente al negro tizón”

Y la línea en la que habla de:

“El Otoño irradiando sobre los bosques amarillos”

El cambio otoñal de nuestros bosques no ha causado todavía una impresión profunda en nuestra propia literatura. Octubre no ha teñido apenas nuestra poesía.

Muchos, que han pasado su vida en las ciudades, y que nunca han tenido la oportunidad de venir al campo en esta estación, nunca ha visto esto, la flor, o más bien la fruta madura, del año. Recuerdo haber cabalgado con un ciudadano, quien, aún una quincena demasiado tarde para los colores más brillantes, fue sorprendido y no creía que hubiera habido algo más brillante. Nunca antes había oído de este fenómeno. No solamente muchos en nuestras ciudades no lo han presenciado nunca, sino que es escasamente recordado por la mayoría de año en año.

La mayoría confunde el cambio con la caída de la hoja, como si confundieran manzanas maduras con podridas. Pienso que el cambio a un color más alto en una hoja es una evidencia de que ha llegado a un madurez tardía y perfecta, respondiendo a la maduración de los frutos. Son generalmente las hojas más bajas y antiguas las que primero cambian. Pero de la misma manera que el insecto de corta vida y color brillante, las hojas no maduran sino para caer.

Generalmente cada fruto, al madurar, y justo antes de caer, cuando comienza una vida más individual e independiente, necesitando menos nutrición de cualquier fuente, y la misma no tanto de la tierra a través del tronco como del sol y el aire, adquiere un tinte brillante. Así también las hojas. El fisiólogo dice que ello es “debido a una incremento en la absorción de oxígeno”.Esta es la explicación científica del asunto- solo una reafirmación del hecho. Pero yo estoy más interesado en la rosada mejilla que en saber qué dieta particular ha seguido la joven. El bosque y la hierba, la película de la tierra, debe adquirir un color brillante, un evidencia de su madurez, como si el globo de la tierra fuera una fruta de su tronco, siempre con una mejilla hacia el sol.

Las flores no son sino hojas coloreadas, los frutos no son sino flores maduras. La parte comestible de la mayoría de los frutos es, como el fisiólogo dice, “el parénquima o tejido carnoso de la hoja”, de la que están formados.

Nuestros apetitos han comúnmente confinado nuestras visiones de la madurez y sus fenómenos, color, sabor y perfección, a las frutas que comemos y estamos inclinados a olvidar aquella inmensa cosecha que no comemos, que a duras penas usamos, y que es anualmente madurada por la Naturaleza. En nuestras Ferias de Ganado y Exhibiciones de Horticultura hacemos, pensamos, una gran exhibición de frutas honestas destinadas sin embargo a un fin innoble, frutas no valoradas principalmente por su belleza. Pero alrededor y dentro de nuestras ciudades hay anualmente otra muestra de frutos, de una escala infinitamente más grande, frutos que apelan solo a nuestro gusto por la belleza.

Octubre es el mes de las hojas pintadas. Su rico destello irradia ahora alrededor del mundo. Como las frutas y hojas, y el propio día, adquieren un tinte brillante justo antes de morir, así también el año se acaba. Octubre es su cielo de ocaso; Noviembre su última luz.

HDT
(Traducción Guillermo Ruiz)

Esta obra de traducción al español está bajo una Licencia Reconocimiento-No comercial-Sin obras derivadas de Creative Commons

Octubre W.S. Merwin  

I remember how I would say, “I will gather
These pieces together,
Any minute now I will make
A knife out of a cloud.”
Even then the days
Went leaving their wounds behind them,
But, “Monument,” I kept saying to the grave,
“I am still your legend.”


There was another time
When our hands met and the clocks struck
And we lived on the point of a needle, like angels.

I have seen the spider’s triumph
In the palm of my hand. Above
My grave, that thoroughfare,
There are words now that can bring
My eyes to my feet, tamed.
Beyond the trees wearing names that are not their own
The paths are growing like smoke.
The promises have gone,
Gone, gone, and they were here just now.
There is the sky where they laid their fish.
Soon it will be evening.

Friday, October 06, 2017

CANTO DEL QUE RESPONDE




Solo es cuando olvidamos todo nuestro aprendizaje que comenzamos a saber.No me aproximo ni por la anchura de un pelo a cualquier objeto natural en la medida en que presumo de tener una introducción a él de algún estudioso.Para concebirlo con total aprehensión debo por milésima vez aproximarme a él como algo totalmente extraño.Si quieres familiarizarte con los helechos debes olvidar tu botánica.

HDT
Diario 4 de octubre de 1859

¡Oh, mi yo! ¡Oh, vida!, de sus preguntas que vuelven
Del desfile interminable de los desleales,de las ciudades llenas de necios.
De mí mismo, que me reprocho siempre (pues ¿quién es más necio que yo, ni más desleal?),
De los ojos que en vano ansían la luz, de los objetos despreciables, de la lucha siempre renovada,
De los malos resultados de todo, de las multitudes afanosas y sórdidas que merodean,
De los años vacíos e inútiles de los demás, yo entrelazado con los demás.
La pregunta, ¡oh mi yo!, la pregunta triste que vuelve-¿qué de bueno hay en medio de estas cosas, oh, mi yo, oh, vida?

Respuesta
Que estás aquí -que existen la vida y la identidad
Que prosigue el poderoso drama, y que puedes contribuir con un verso.

Walt Whitman ("By the roadside",  traducción de Francisco Alexander)