“Los jesuitas se vieron frustrados por aquellos indios que, siendo quemados en la hoguera, sugirieron nuevos modos de tortura a sus atormentadores. Siendo más fuertes que el sufrimiento físico, a veces sucedió que eran superiores a cualquier consolación que los misioneros pudieran ofrecer, y la ley “trata a los demás de la misma manera que seas tratado” llegaba con menos persuasión a los oídos de aquellos a quien, por su parte, les tenía sin cuidado cómo eran tratados, que “amaban” a sus enemigos de una manera antes desconocida, y estaban muy cerca de “perdonarles” libremente todo lo que hicieron.”
HDT (Walden, Economía)
La historia de Thoreau relata otro caso de inversión: el martirio de San Lorenzo , con la particularidad de que los atormentadores eran "cristianos" y los atormentados “infieles”.El "amor" y el “perdón” habrían sido más libres y previamente no conocidos porque no venían “impuestos” por ningún "credo".
Los indios "infieles" también habrían pedido:
“Assum est, inqüit, versa et manduca”
La historia parece que debe proceder de las "Relaciones" de los Jesuitas, pero en la edición de Walden consultada no consta la fuente.