(Sister Marie Keyrouz, Libano 1963)
Shall
I be raised from death, the spirit asks
And
the sun says yes.
An
the desert answers,
Your
voice is sun scattered in wind
(Afterword,
LG)
VESPERS
You
thought we didn’t know.But we knew once,
Children
know these things. Don’t turn away now-
We
inhabited
A
lie to appease you.I remember
Sunlight
of early spring, embankments
Netted
with dark vinca.I remember
Lying
in a field, touching my brother’s body.
Don’t
turn away now: we denied
Memory
to console you.We mimicked you, reciting
The
terms of our punishment.I remember
Some
of it, not all of it: deceit
Begins
as forgetting.I remember small things, flowers
Growing
under the hawthorn tree, bells
Of
the wild scilla. Not all, but enough
To
know you exist: who else had reason to create
Mistrust
between a brother and sister but the one
Who
profited, to whom we turned in solitude? Who else
Would
so envy the bond we had then
As
to tell us it was not earth
But
heaven we were losing?
(Louise Elizabeth Glück (Nueva York, 22 de abril de 1943): El iris salvaje)
“Al
mundo no le interesan los hombres. A no ser, por supuesto, que atribuyamos al
mundo un origen divino, y llevamos milenios sin haber podido demostrarlo.
(…)
Esta
escasa frecuencia es proporcional al número
de portavoces existentes, cuya idoneidad, es decir, su capacidad para
percibir una verdad no humana, se recoge en nuestra lengua con el nombre de “genio”.
Esta escasa frecuencia es, por lo tanto, la madre del azar.
(…)
En
este sentido, la habilidad para hacer constituye una habilidad pasiva: la
respuesta de un grano de arena al horizonte. Pues es la sensación de un
horizonte abierto lo que nos impresiona en una obra de arte o en un descubrimiento
científico, ¿no es cierto?
(…)
La
creatividad es el comentario de una vasta playa cuando un grano de arena es
engullido por el océano. Si esto les parece a ustedes demasiado trágico o grandilocuente,
querrá decir que se encuentran demasiado lejos de ese océano, allá lejos en las
dunas. La noción de suerte o azar propia de artistas y científicos refleja
esencialmente su proximidad al agua
(…)
La
que mejor se mueve en este contexto es la poesía, puesto que la lengua
constituye, por así decirlo, la primera información que la materia da sobre sí
misma a lo animado. Para decirlo de un modo quizás menos polémico, la lengua es
un aspecto diluido de la materia.
(…)
De
forma casi inevitable, un poema (sobre todo aquel que tenga estructura
estrófica) genera una fuerza centrífuga cuyo radio, siempre creciente, lleva al
poeta muy lejos de su destino inicial.
Lo
imprevisible del lugar de llegada, así como la posible gratitud que pueda sentirse,
hacen que el poeta vea su habilidad para hacer como una habilidad pasiva.
(…)
(Joseph Brodsky (San Petersburgo
24-05-1940 –Nueva York 28-01-1996): “El maullido de un gato” (Conferencia
pronunciada en un simposio organizado por la Fundación para la Creatividad y el
Liderazgo, celebrado en Zermatt, Suiza, en enero de 1995). En el libro “Del
dolor y la razón”, traducción de Antonio Martí García)
…But a voice that brings forever
never ending memories
(Eterna memoria)
What
is this heaven which they expect, if it is no better than they expect? Are they
prepared for a better than they can now imagine? Where is the heaven of him who
dies on a stage, in a theatre? Here or nowhere is our heaven.
(…)
We love to hear some men speak, though we hear
not what they say; the very air they breathe is rich and perfumed, and the
sound of their voices falls on the ear like the rustling of leaves or the
crackling of the fire. They stand many deep. They have the heavens for their
abettors, as those who have never stood from under them, and they look at the
stars with an answering ray. Their eyes are like glow-worms, and their motions
graceful and flowing, as if a place were already found for them, like rivers
flowing through valleys. The distinctions of morality, of right and wrong,
sense and nonsense, are petty, and have lost their significance, beside these
pure primeval natures.
(HDT,
A Week in the Concord and Merrimack Rivers)