Saturday, October 31, 2009

TINTES OTOÑALES (V)












EL OLMO

Ahora también, el primero de Octubre, o más tarde, los olmos están en el cénit de su belleza otoñal. Grandes masas pardo-amarillentas, cálidas por su horno septembrino, colgando sobre la carretera. Sus hojas están perfectamente maduras. Me pregunto si hay alguna madurez paralela en las vidas de los hombres que viven bajo ellos. Cuando miro calle abajo, que está alineada con los árboles, me recuerdan, tanto por su forma como por su color, a las masas de gavillas de grano que amarillea, como si la cosecha hubiera venido de hecho a la ciudad y pudiéramos esperar encontrar, al fin, alguna madurez y sabor en los pensamientos de los ciudadanos.

¿Bajo estas agitadas pilas de hojas brillantemente amarillas dispuestas a caer sobre las cabezas de los paseantes, cómo puede prevalecer cualquier crudeza o inmadurez de pensamiento o acción?. Cuando permanezco donde media docena de grandes olmos descienden sobre una casa, es como si permaneciera junto a una corteza madura de calabaza, y me siento tan carnoso como si yo fuera la pulpa, aunque pueda ser también algo magro y seminal.

¿Qué es el último verdor del olmo inglés, como un pepino fuera de estación, que no sabe cuando terminar, comparado con la temprana y dorada madurez del árbol americano?. La calle es el escenario de una gran casa-cosecha. Sería valioso plantar estos árboles aunque solo fuera por su valor otoñal. Piensa acerca de estas grandes copas amarillas o parasoles tendidos sobre nuestras cabezas y nuestras casas juntos por una milla, haciendo la ciudad una y compacta, un ulmarium, que es al mismo tiempo una guardería de hombres.

Y entonces cuán gentilmente e inobservados depositan su carga y dejan pasar el sol cuando es deseado, sus hojas no escuchadas cuando caen sobre nuestros tejados y nuestras calles; y así el parasol de la ciudad es cerrado y enviado lejos. Veo al comerciante dirigirse a la ciudad, y desparecer bajo su conjunto de copas de olmo, con su grano, como si entrara en un inmenso granero o silo. Estoy tentado de ir allí como a un descascaramiento de pensamientos, ahora secos y maduros, y listos para ser separados de sus integumentos; pero presiento que ello será principalmente cáscaras y poco acumen, grano descacarillado para cerdo, apto solo para comida animal – porque con arreglo a lo que siembras, así cosecharás.

HDT

ULMUS AMERICANA

(Traducción Guillermo Ruiz)



No comments:

Post a Comment